Sitios arqueológicos que debes conocer

Rapa Nui, llamada por sus antiguos habitantes como Kahu Kahu o Hera y posteriormente como Te Pito o Te Henua, traducido como “El ombligo del mundo”, está ubicada en uno de los vértices del triángulo de la Polinesia, en el continente oceánico.

Su cultura se ha transmitido de forma oral de generación en generación, así se sabe de las historias de los primeros habitantes, sus costumbres y tradiciones.

Rapa Nui es uno de los museos al aire libre más grande del mundo, cuenta con un legado y patrimonio arqueológico impresionante, lo más visible, son sus cerca de 300 Ahu o plataformas ceremoniales para sus ancestros, los cuales tenían uno o más Mōai. Se puede identificar aproximadamente 1.000 mōai y más de 3.000 petroglifos alrededor de la isla, motivos por los cuales fue nombrada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1995.

Importante recordar, cuando visites Rapa Nui, debes considerar que es un territorio frágil, por tanto, debes ser responsable y respetuoso con el entorno, valorando la cultura y su patrimonio natural. Asegúrate de seguir las normas y recomendaciones de las autoridades locales, y de no dañar los sitios arqueológicos y las áreas protegidas, así como también cuidar el medioambiente.

Conoce aquí cuáles son los sitios que pueden visitar en tu estadía por esta isla llena de magia y sorpréndete con la fascinante historia de una civilización que desarrolló hasta su propio sistema de escritura.

RANO KAU Y LA ALDEA CEREMONIAL DE ꞌŌROŊO 

 Rano Kau es uno de los tres volcanes que dan origen a la formación de Rapa Nui. Su cráter de más de un kilómetro de diámetro nos permite ver lo que hay en su interior. Allí, una gran laguna con islas de totora y juncos forman un paisaje que parece situado en otro lugar del cosmos.

En su interior se acumula la humedad, conformando un microclima propicio para el cultivo. Hay una gran diversidad de vegetación nativa sorprendente: plátanos, tubérculos, café, guayabas, entre otras especies comestibles que nos hacen pensar en las vidas que fueron alimentadas con esos productos.

 

 VINAPŪ

Es un sitio en una amplia explanada de baja pendiente, se ubica en el borde costero sur y al oeste de la pista del aeropuerto Mataveri. En el lugar podrás ver tres ahu, uno de los cuales, Tahiri, concentra la atención dada la similitud de su muro posterior con las construcciones incas identificadas en Sacsayhuamán, al norte del Cuzco en Perú. El segundo ahu, Ahu Vinapu, posee un mōai que presuntamente sería el único con apariencia femenina. Del tercer ahu sólo quedan algunos vestigios. El patrimonio arqueológico de este sitio evidencia deterioro, provocado principalmente por fenómenos naturales como: humedad salina, líquenes e invasión de la vegetación.

Se puede llegar en vehículo desde Haŋa Roa por la Avenida Hotu Matu’a, en dirección a Vinapū. Luego se debe continuar por el camino de tierra hasta llegar al lugar indicado.

 
 VAIHŪ

En este lugar podrás encontrar un antiguo asentamiento compuesto por una plataforma ceremonial de gran tamaño. Este gran Ahu, tiene un muro de contención posterior con forma semicircular, mide 86 metros de largo y 12 de ancho, soportaba ocho estatuas que podrás ver hoy por los alrededores de la plataforma situados boca abajo.

Este lugar no ha sido restaurado y constituye un ejemplo del período de derribamiento de los mōai, lo que se desarrolla desde principios del siglo XVIII, donde comienzan las guerras y disputas entre clanes diferentes de la isla.

 

 

 ꞌAKA HAŊA

ꞌAka Hanga es una aldea antigua, donde podemos comprender cúal era la distribución de la aldea en relación al centro ceremonial o Ahu. Este, de 18 metros de largo, tiene el valor de no estar restaurado. Los mōai están en el suelo, tal como quedaron luego de haber sido tumbados durante las guerras tribales. Apreciar estos gigantes de espaldas y de frente sobre el suelo, colosales, es una gran experiencia. El ahu de ꞌAka Haŋa sostuvo alguna vez alrededor de una docena de moai con tamaños entre 5 y 7 metros de altura.

Además de la plataforma, en el sitio se encuentran restos de hare paeŋa, las casas con forma de bote, cuya base era construida en piedra por los antiguos habitantes. Las casas en su frente tienen una pequeña plaza ornamental de piedra.

 

Para llegar desde en vehículo o a pie desde Haŋa Roa, se debe tomar la avenida Hotu Matu’a en dirección a ꞌAna Kena, luego doblar a mano derecha en el cruce que indica el camino a Rano Raraku. El sitio está ubicado en el punto medio de la costa sur de la isla.

 

 RANO RARAKU

En la cantera o fábrica de los mōai, se encuentra el volcán Rano Raraku, siendo en muchas dimensiones uno de los lugares más apasionantes del planeta. Antiguamente, este sitio era llamado Mauŋa ꞌeo , que significa “cerro perfumado” en lengua rapa nui, ya que habría existido una planta muy aromática cuyo olor impregnaba toda la zona.

Rano Raraku alberga la cantera donde se construían los mōai y desde donde eran trasladados a los diferentes ahu de la isla (plataformas ceremoniales). En esta cantera se tallaron cerca de 1040 estatuas hasta hoy, de las cuales 400 quedan en la ladera del volcán en diferentes fases de fabricación y tallado, incluyendo algunas que en el proceso de modelado fueron desechadas por diversas razones.

 

Para llegar en vehículo o a pie desde Hanga Roa se debe tomar la Avenida Hotu Matu’a en dirección a ꞌAna Kena – Rano Raraku; luego llegar a un cruce que indica la bifurcación hacia Rano Raraku, doblar a mano derecha y avanzar aproximadamente 13 kms. hasta llegar al lugar. También se puede acceder exclusivamente a pie desde el circuito Te Ara O Te Mōai.

 

TOŊARIKI

El ahu Toŋariki es la plataforma más imponente de la isla. No es fácil describir lo que se siente al contemplar estos 15 mōai erguidos, majestuosos, con el intenso azul del mar de fondo y su horizonte infinito y circular.
Este ahu representa el momento de máximo esplendor escultórico de la isla. Con una plataforma ceremonial de 220 metros de longitud, es la estructura más grande de esta naturaleza en toda la Polinesia. Su eje está orientado al sol naciente del solsticio de verano, como una muestra más de la importancia y del conocimiento astronómico para el pueblo rapa nui.


Para llegar en vehículo o a pie a este lugar situado a 15 kms. de Haŋa Roa, se debe tomar el camino en dirección a Rano Raraku. El sitio se ubica a un kilómetro de la entrada.

 

 TE PITO KURA

Está compuesto por el Ahu o Paro, cuyo único mōai, llamado Paro, se ha mantenido intacto en la posición en que quedó cuando fue derribado (no se sabe con exactitud si por los europeos o por los propios rapa nui). Cuenta con dimensiones espectaculares: sus orejas miden 2 metros, su altura alcanza los 11 metros y se estima que su peso debe superar las 80 toneladas. A su costado yace su -también gigantesco- pūkao con casi 2 metros de altura y alrededor de 10 toneladas de peso.

Junto al ahu, a unos 6 metros de distancia, se encuentra una gran piedra esférica de 80 centímetros de diámetro, que se identifica como el Ombligo del Mundo, la que, según la tradición oral, fue traída por Hotu Matu’a en su embarcación. Es una piedra esférica y lisa que, según se dice, concentra una energía magnética y sobrenatural llamada “mana”.

En el sitio encontrará un estacionamiento y una pirca que impide el acceso vehicular, letreros y demarcación de acceso peatonal.
Desde Haŋa Roa se puede acceder en vehículo o a pie, tomando el camino hacia Anakena y en el cruce, doblar a mano derecha en dirección a Pōike por la costa norte de la isla, justo antes de llegar cerca de la Caleta La Pérouse.

 

 ꞌANA KENA

En la bahía de Haŋa Rau o te Ariki (Bahía de Reyes), se encuentra la playa de ꞌAna Kena, que recibe su nombre de la cueva homónima cercana al lugar.

Esta es la playa de arena más grande de la isla, donde encontrará aguas de color turquesa, blancas arenas de coral y cocoteros traídos desde Tahiti. Sin embargo, ꞌAna Kena es mucho más que una playa, es un complejo donde se combina la presencia de los ahu Ature Huki y Nau Nau, restaurados en 1954.

El sector está localizado a 18 kilómetros al noreste de Hanga Roa, a unos 30 minutos en auto. También es posible ir en bote o bicicleta. Si dispone de tiempo y vehículo asegurado para regresar, permítase esperar allí que caiga la noche y aparezcan las estrellas.

 

PUNA PAU

Puna Pau es un pequeño cono volcánico cuyo nombre viene de un puna o pozo de agua dulce. Puna Pau significa “manantial seco”, por lo que se puede suponer que en algún momento contuvo agua o que hubo agua en sus alrededores.
En el cráter de este cono volcánico hay una cantera. De esta cantera se extraía la escoria roja o hani-hani. Se trata de una ceniza volcánica que se caracteriza por ser blanda y fácil de tallar.


Para llegar hasta este punto, te pues trasladar en vehículo o a pie, desde Haŋa Roa tomar Av. Hotu Matu’a en dirección a ꞌAna Kena. Existen dos cruces señalizados, en este caso desde Haŋa Roa hacia ꞌAna Kena es el segundo que se encuentra a mano izquierda y que la señalética hace referencia hacia Ahu Akivi y Puna Pau.

 

AHU A KIVI

Entre las muchas plataformas ceremoniales o ahu de la isla, Ahu A Kivi es particular. A diferencia de la gran mayoría, esta plataforma está ubicada tierra adentro y no cerca del mar, a 10 kms. de Haŋa Roa.

Tiene un largo total de 90 metros, con una plataforma central de 38 metros, en la que se levantan 7 mōai con un alto aproximado de 4 metros cada uno y un diseño bastante homogéneo, lo que hace pensar que se tallaron y levantaron al mismo tiempo, en el siglo XII.

Otra singularidad del Ahu A Kivi es la posición de las esculturas, ya que se diría que están mirando hacia al mar y no de espaldas a él como era habitual. Su posición también está relacionada con la astronomía: técnicamente se puede presenciar dos alineaciones simultáneas los días de equinoccios: con el Sol y con el Cinturón de Orión.

La mejor luz para ver este sitio arqueológico y conseguir buenas fotos se tiene por la tarde. En vehículo o a pie se accede desde Haŋa Roa tomando Av. Hotu Matu’a en dirección a ꞌAna Kena. Al llegar al cruce señalizado se debe doblar a mano izquierda y continuar 5 kms. en dirección a Ahu A Kivi.

 
ꞌANA TE PAHU

ꞌAna Te Pahu, la caverna más grande de Rapa Nui, está formada por canales de lava que se extienden a lo largo un importante territorio, a través de los cuales se conectan cuatro cámaras subterráneas. Su gran amplitud la hizo ideal para vivir en tiempos primitivos; varios ꞌumu (antiguo sistema de cocina) indican que fue ocupada también para preparar alimentos. Gracias a las variadas aberturas naturales de la cueva, sus habitantes pudieron cocinar evitando que el humo se acumulara en el interior.

El ingreso a la cueva está deteriorado y hay que bajar sus grandes escalones de piedra con precaución. Se recomienda llevar linterna y casco de seguridad para evitar accidentes, debido a los desniveles de altura y a la escasa luminosidad del interior.

Para llegar en vehículo o a pie desde Haŋa Roa, se debe tomar la calle Ara Roa Rakei, que pasa por el costado de la parroquia, en dirección a Ahu Akivi. Antes de llegar a este lugar, hay un portón de madera y podrás ver la caseta de la comunidad indígena Mau Henua, donde te recibirá un mutoꞌi o guardia que permitirá tu acceso y el de tu guía una vez le enseñes tu ticket de ingreso al parque nacional Rapa Nui.


ꞌANA KĀKEŊA

La cueva ꞌAna Kākeŋa se encuentra bajo la superficie y en su parte final tiene dos salidas (como dos grandes ventanas) formadas por la decantación de lava hacia el mar, desde donde se puede apreciar los acantilados y el borde costero inmediato, con una impresionante vista al Motu Tautara, islote que podrás apreciar desde las vistas que ofrece la cueva.

La entrada, más parecida a un montículo de piedras, es muy pequeña y solo permite el paso de una persona a la vez. Es necesario llevar una linterna, ya que el recorrido continúa por un túnel bastante estrecho y con el cielo a veces muy bajo (varía entre 1,4 y 1,8 metros). Pasados unos 3 ó 4 metros la caverna se agranda y es posible caminar de pie cómodamente, porque el camino se hace más fácil e iluminado gracias a la luz que entra por las dos ventanas naturales.

Ana Kākeŋa está ubicada a 5 kms. al norte de Haŋa Roa. Para llegar en vehículo o a pie se debe seguir el camino a Ahu Tepeu por calle Miru y avanzar por la costa hasta llegar al lugar indicado.


TĀHAI

 

Tāhai es un antiguo centro ceremonial que reúne un conjunto de ahu o plataformas con mōai.

Dado que está muy cerca del pueblo en pleno sector de Haŋa Roa, es de fácil acceso y se puede ir a pie; es el centro ceremonial más importante cerca del pueblo. Se ubica a unos 10 minutos caminando desde la bahía de Haŋa Roa hacia el oeste por la costa.

Paseando por sus alrededores todos nos sentimos inspirados, más aún si acudimos al atardecer: Tāhai es reconocido como el mejor lugar de Rapa Nui para ver caer el sol, el cual desciende entre los mōai dándonos un regalo de sensaciones, colores y luminosidades.

Una de las plataformas cuenta con una sola estatua gigante, de nombre Ko Te Riku. Este mōai es el único de la isla que posee ojos y, por lo tanto, permite saber cómo eran los mōai completos, con sus ojos abiertos que simbolizan el mana (poder sobrenatural, fuerza) y con el pūkao (tocado de pelo). La restauración se llevó a cabo según la hipótesis de que las cuencas de los ojos de estos monumentos estaban rellenas con corales.
La siguiente plataforma es llamada Ahu Vai Uri y en la última plataforma del Ahu Tāhai se agrupan cinco mōai en distintos estados de conservación.